Los nicaragüenses reciben junio con dos semanas continuas de alzas en el precio de los combustibles, especialmente los de mayor consumo a nivel nacional, la gasolina súper y el diésel, según informaron fuentes del sector petrolero. Este nuevo incremento volverá a acercar a la súper a los 40 córdobas, según estimaciones confirmadas.
Desde este domingo 13 de junio, la gasolina súper subirá 0.51 y la regular se encarecerá 0.47 córdobas por litro. En tanto el diésel aumentará 0.49 córdobas por litro.
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Por galón, la gasolina súper registrará una alza de 1.93 córdobas, la regular, por su parte, se encarecerá 1.78 córdobas y en el caso del diésel, el carburante de mayor consumo en el país, subirá 1.85 córdobas por galón, que contiene 3.785 litros.
Nuevos precios de las gasolinas
Según las proyecciones, desde este domingo en Managua la gasolina súper pasará de 38.84 a 39.35 córdobas por litro. El galón se empezará a comercializar en 148.94 córdobas.
En el caso de la gasolina regular, que esta semana se vende en 37.68 córdobas, desde las cero horas del domingo se empezará a cotizar en 38.15 córdobas por litro. En tanto, el galón se encontrará en 144.40 córdobas.
El diésel, cuyo valor actual se encuentra en 31.49 córdobas por litro, pasará a costar 31.98 córdobas. Es decir, que a partir de este fin de semana el galón se cotizará en 121.04 córdobas.
Los precios de las gasolinas y el diésel no son regulados por el Estado, sino que son establecidos por cada una de las empresas distribuidoras que operan en Nicaragua. Asimismo, estas estimaciones en cuanto al valor de los combustibles son válidas solo en Managua, puesto que, pese a que la variación será la misma en todo el territorio nacional, los precios en los demás departamentos son mayores debido a que se les incorporan otros costos, como el de distribución.
Según registros del Instituto Nicaragüense de Electricidad (INE), sin incorporar los cambios de este fin de semana, en lo que va del año se han registrado 19 alzas y cuatro bajas en la gasolina regular; veinte alzas y tres bajas en la gasolina súper y 16 alzas y siete bajas en el diésel, “debido a las fluctuaciones en los precios de referencia internacional de estos productos”.
Continuas alzas afectan bolsillo del consumidor
Marvin Pomares, presidente del Instituto de Defensa de los Consumidores (Indec), sostiene que de enero hasta la fecha “prácticamente son 19 semanas en las que ha aumentado el costo del combustible”, situación que perjudica el bolsillo de los usuarios de este país, más aún en aquellos que trabajan directamente con este producto, como son el sector selectivo del taxi o el servicio de carga, que es el que traslada alimentación de un país a otro.
“Los aumentos del combustible afectan a todos, también aumentan algunos productos de la canasta básica. Este lunes los cortes de la carne aumentaron de precio, el huevo también se ha mantenido con un valor alto, casi todo aumentó, aunque otros bajaron”, aseguró.
Pomares añade que en el caso de los taxis, “la gente se ha quejado que los taxistas últimamente han estado cobrando por arriba de lo establecido; sin embargo, hay taxistas que te dicen que no lo hacen debido a que hay más taxis (laborando) y no pueden aumentar el precio porque la gente no se va”.
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“Esperamos que el incremento para esta semana no sea tan exorbitante, que sea mínimo y sea realmente el aumento a la paridad internacional, porque a veces el barril del petróleo aumenta nada más 50 centavos dólar y cuando vemos aquí solamente por un litro ya te cobraron eso”, enfatizó.
Pero, ¿a qué se deben tantas alzas? Juan Carlos López, coordinador del Centro Jurídico Social de Ayuda al Consumidor (CJSAC), explica que internacionalmente los precios de los combustibles siguen manteniendo determinados aumentos y disminuciones, pero en el caso de Nicaragua “el problema radica en la manipulación de precios que existen a nivel corporativo y que es permisivo por el Gobierno”.
“La permisibilidad está en que todos los agentes económicos, todas las empresas que trabajan en combustible, que importan este producto, se amarran entre ellos y fijan una banda de precios a nivel nacional; eso hace que los precios locales siempre tiendan una percepción de que no hay disminución”, señaló.
López agrega que aunque a nivel internacional los combustibles experimenten una disminución en su valor por una o dos semanas, en Nicaragua el escenario es diferente puesto que “normalmente las rebajas son pocas y las alzas son constantes”.
“Eso pasa por un mercado no regulado de manera transparente, ni eficiente; tenemos ese problema respecto a la competitividad, hay un oligopolio de los precios de los combustibles, las empresas se ponen de acuerdo y le venden caro a todos los consumidores, independientemente de los precios internacionales.
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¿Qué puede hacer el consumidor ante esta situación? Al respecto López añade que “ahorrar combustible lo más que pueda, aminorar los viajes a ciertos puntos, mejorar el sistema automotriz del vehículo, aunque claro, esto tiene que ver con una inversión. La otra opción puede ser que el consumidor tenga incidencia, por ejemplo protestas o reclamos más contundentes ante los entes reguladores y el Estado”.
“Porque el Estado es el que permite esa confabulación de precios, de una manera indirecta. No puede imponer precios, pero según la ley, tiene la potestad de poder revisar los costos, los precios y cuando haya una manipulación en el mercado el Estado puede corregirlo, hay mecanismos jurídicos”, concluyó.
Mayor demanda de petróleo en el mundo
A nivel internacional, se espera que la demanda mundial de petróleo supere los niveles previos a la pandemia para finales de 2022, en contradicción con los esfuerzos necesarios para limitar el calentamiento del planeta, anunció este viernes la Agencia Internacional de Energía (AIE).
“La demanda mundial de petróleo va a continuar recuperándose” y “de aquí a finales de 2022 superará los niveles previos al covid”, dijo la institución en un informe que detalla las previsiones para el año que viene.
Tras un retroceso récord de 8.6 millones de barriles diarios (mbd) en 2020, la demanda mundial debería aumentar en 5.4 mbd este año y en 3.1 mbd en 2022 hasta establecerse en unos 99.5 mbd de media.
En el último trimestre de 2022, la demanda debería ser de 100.6 mbd, según la AIE. El pico mundial hasta el momento se alcanzó en el cuarto trimestre de 2019, en 100.5 mbd, antes de la pandemia.
“La recuperación será desigual tanto entre las regiones como entre los sectores y productos”, apunta el informe.
La agencia estima que, aunque el fin de la pandemia está en el horizonte en los países desarrollados, la lentitud en la vacunación podría afectar a la recuperación en otras naciones.
“Los productos petroquímicos se beneficiarán de la fuerte demanda de plásticos, mientras que el comercio mundial apoyará la demanda de combustibles marítimos”, agrega.
Pero “el sector de la aviación será el más lento en recuperarse, ya que algunas de las restricciones a los viajes deberían seguir vigentes hasta que la pandemia esté firmemente bajo control”.
La organización también espera que la gasolina siga por debajo de su nivel previo a la crisis por el mantenimiento del trabajo a distancia en varios sectores y la progresión de los vehículos eléctricos.
“Enormes esfuerzos”
“Responder al crecimiento esperado de la demanda no debería suponer un problema”, estima la agencia, que destaca las capacidades de producción adicionales de los países de la OPEP y de sus aliados.
Estos países, reagrupados en el grupo OPEP+, limitaron su producción para sostener los precios del crudo durante la crisis, pero ahora empiezan a reabrir sus grifos con 2 mbd adicionales.
La agencia estima que los países de la OPEP+ podrían producir hasta 6.9 mbd más y, si se levantan las sanciones internacionales contra Irán, el mercado contaría con otros 1.4 mbd.
Sin embargo, la AIE subraya de nuevo las dificultades que plantea para lograr la neutralidad de carbono en el mundo y limitar el calentamiento global.
“La demanda de petróleo debería seguir aumentando, subrayando los enormes esfuerzos necesarios para alcanzar las ambiciones declaradas”, apunta.
La agencia, que aconseja a los países desarrollados, destacó en un informe publicado en mayo los esfuerzos necesarios para mantener el cambio climático bajo control, conforme al Acuerdo de París sobre clima.
La organización aboga así por abandonar cualquier proyecto de prospección petrolífera o gasística y dejar de vender vehículos térmicos nuevos a partir de 2035.
Esto implicaría que la demanda de petróleo no supere nunca su pico de 2019, ya que caería gradualmente a 72 mbd en 2020 y a 24 mbd en 2050, estimó la AIE en mayo.